El corazón
El corazón es el órgano principal del sistema circulatorio. Su función es propulsar la sangre a todo el cuerpo. Situado en el mediastino, está constituido por cuatro cavidades — dos aurículas en la región superior y dos ventrículos en la inferior—, las arterias aorta y pulmonar, las venas cavas inferior y superior, las válvulas bicúspide, tricúspide, aórtica y pulmonar, y tres capas protectoras: el pericardio, el miocardio y el endocardio.
Un grueso tabique que separa las zonas derecha e izquierda impide que la sangre pase directamente de un lado al otro. Para arribar al lugar del que partió, el flujo sanguíneo debe recorrer el circuito general y el circuito pulmonar. En el general, la sangre, rica en oxígeno, es enviada desde el ventrículo izquierdo hacia la arteria aorta y desde allí es transportada a todo el cuerpo por otras arterias y capilares. Vuelve por las venas cavas con abundancia de desechos hasta la aurícula derecha. En cambio, en el circuito pulmonar, la sangre, cargada de impurezas y dióxido de carbono, es conducida desde el ventrículo izquierdo a las arterias pulmonares por las que llega a los pulmones, es oxigenada por esos órganos y emprende su retorno hasta la aurícula izquierda.
Al impulsar la corriente sanguínea se contrae, y cuando la recibe, se dilata. Estos movimientos son la sístole y la diástole y su conjunto es denominado ciclo cardíaco o latido. En él son fundamentales los movimientos de las válvulas cardíacas para permitir o impedir el paso de la sangre. En condiciones normales, la frecuencia cardíaca de los seres humanos varía entre sesenta y siete y setenta y cuatro latidos por minuto
“Para arribar al lugar del que partió…” (segundo párrafo). En ese fragmento, podemos sustituir “arribar”, sin cambiar el sentido contextual, por:
1) volver
2) subir
3) abandonar
4) llegar
5) retornar
Son correctas: